MLB- Mientras los Rays finalizaban su primer entrenamiento con el equipo completo esta semana, el cubano Randy Arozarena caminaba a pasos largos por la línea de foul en el jardín derecho en el Campo 4 del Charlotte Sports Park, sosteniendo el bate y el guante con su mano izquierda. Caminando junto a la sensación de Tampa Bay de la postemporada pasada estaba el cotizado prospecto dominicano Wander Franco, con un bate en su mano izquierda y una mascarilla con el logo de los Rays cubriendo su rostro de la nariz hacia abajo.
Se trató de una imagen de la singular posición que tiene el equipo esta primavera, regresando después de haber participado en una Serie Mundial liderada por una faena ofensiva de Arozarena mientras poseen la mejor finca de todo el béisbol encabezada por el mejor prospecto de la Gran Carpa. Y fue un recordatorio de la mayor fortaleza de la organización, de la cual el gerente general Erik Neander hizo énfasis mientras aparecía en el dugout de casa en el complejo primaveral de los Rays por cerca de dos horas después de que Arozarena y Franco salieron del terreno juntos.
“Tenemos el talento y tenemos la profundidad”, exclamó Neander. “Eso es lo que necesitas para ganar muchos juegos”.
Y, además, los Rays tienen la motivación de ganar dos partidos más que el año pasado.
La temporada 2020 de los Rays está clasificada entre las mejores en la historia del club, con récord de 40-20 en la acortada campaña regular y el banderín del Este de la Liga Americana conquistada en la postemporada, su segundo en la historia de la franquicia. Lograron tantas cosas el año pasado que es imposible catalogar el 2020 como una decepción, destacó el jardinero veterano Kevin Kiermaier. A pesar de ello, se quedaron cortos del objetivo final, cayendo en la Serie Mundial en seis juegos ante los poderosos Dodgers. Ahora, los Rays se reportaron a los campos de entrenamiento decididos a dar ese último paso.
“Habernos quedado tan cerca de ese título nos da ese empuje, esa motivación”, manifestó Kiermaier. “Pienso en ello a menudo. Queríamos terminar la temporada de la mejor manera, algo que no pudimos lograr, y ahora tenemos que pensar en qué podemos hacer para mejorar como equipo, tratar de regresar a ese escenario y ganarlo todo.
“Tenemos un equipo capaz de lograr eso y por eso es un momento bien emocionante para ser un Ray de Tampa Bay”.
El campocorto dominicano Willy Adames coincidió con dicho sentimiento durante el primer entrenamiento del club como grupo el martes y expresó el mismo nivel de confianza en las probabilidades de ganar de los Rays este año. El año pasado, Tampa Bay utilizó su derrota ante Houston en la Serie Divisional de la Liga Americana en 2019 como una motivación para llegar lejos en octubre. Ahora que han probado el Clásico de Otoño, los Rays están ansiosos por regresar de nuevo.
“A todos les encantó la experiencia ahí, y todos desean regresar y ganarlo todo”, destacó Adames. “Sé que todos tienen hambre de triunfo y desean ganarlo todo este año. En lo personal, me siento motivado por el equipo que tenemos ahora mismo”.
Sin embargo, los Rays enfrentan varias interrogantes mientras inician su defensa del título del Este de la Liga Americana. Después de que Neander detalló las áreas de fortaleza del club, el piloto Kevin Cash insistió en que lo único negativo en potencia es lo desconocido. Específicamente, es imposible determinar cómo los lanzadores y jugadores de posición lidiarán con el hecho de pasar de una temporada de 60 juegos a una de 162 encuentros.