Juan José Soto se llevó algunos “souvenirs” de la serie de cuatro juegos de los Nacionales contra los Bravos esta semana: Cinco hits, seis anotadas, dos jonrones, seis empujadas y seis bases por bolas.
El dominicano llegó a Atlanta bateando .267/.387/.385, con OPS de .772. Cuando partió de dicha ciudad hacia Filadelfia, había mejorado a .281/.411/.432 con .843. En total, se embasó en 11 de sus 17 visitas al plato en el Truist Park.
“Es emocionante, porque sabes de qué es capaz”, dijo el utility de los Nacionales, Josh Harrison. “Él sabe de lo que es capaz. Vio algunos pitcheos y no los falló. De eso se trata tener buenos turnos—cuando ves tu pitcheo, hay que aprovecharlo. Y él lo hizo en esta serie”.
Soto había pasado 11 partidos sin dar cuadrangular antes de llegar a Atlanta y no había volado la cerca en encuentros consecutivos esta campaña, pero vs. los Bravos, el toletero salió de esos baches. Una clave fue darle a la bola a la banda contraria. El martes, disparó un sencillo productor al jardín izquierdo y siguió eso con un bambinazo de 409 pies por esa misma banda.