Brian Castaño lució conforme luego del polémico fallo que le impidió convertirse en el primer argentino en hacerse acreedor de los cuatro cinturones principales de los superwelter. Pese a que debió “resignarse” a conservar el cetro de la OMB y no pudo agregarle los de la AMB, FIB y CMB, que quedaron en propiedad de Jermell Charlo, mostró satisfacción tras el combate y lejos estuvo de buscar cizaña.

Sin hacer declaraciones explosivas ni hablar de “robo”, sí pidió una nueva oportunidad -lo dicho- sin mayores estridencias y aceptando el resultado. ¿Habrá pensado que los jueces serían aun más localistas?